miércoles, 14 de octubre de 2009
Finalmente, 2 semanas después de que se empezasen a enviar las invitaciones, cuando ya contaba sólo con mi paciencia recibí la esperada invitación a empezar a utilizar Wave. Nervios antes de abrir el regalo. Nervios al abrirlo. Nervios al echar el primer vistazo.
Y una GRAN decepción al encontrarme con que no hay nadie con quien probarlo. Y al cabo de 5 frustrantes minutos (gran parte de ellos jugando al sudoku contra mi mismo), paso a otra cosa y sigo trabajando con cosas más acuciantes e importantes.
Eso sí, empiezo a enviar las cortas 8 invitaciones que tengo para probar Google Wave... para al poco rato darme cuenta de que NO son instantaneas. En fin... hay que esperar para conseguirlas.